El monstruo ha venido a vernos. Otra vez. Tadej Pogacar, el mejor ciclista de la actualidad, arrasó el sábado 5 de marzo en la Strade Bianche. El esloveno destrozó a sus rivales por las carreteras de tierra de la Toscana, con un espectacular ataque a 50 kilómetros de meta. Ahora, el de UAE es favorito para llevarse su segunda Tirreno-Adriático consecutiva.
Horas antes, la otra dominadora del mundo del ciclismo en carretera, se quedó con la miel en los labios. Annemiek van Vleuten terminó segunda en la Piazza del Campo de Siena, llegada mítica ya para una carrera al alza. Al día siguiente, el Jumbo-Visma estrenó la París-Niza con una auténtica exhibición.
El sterrato de la Toscana buscaba un nuevo dueño
La Strade Bianche es, para muchos, el sexto monumento del ciclismo mundial. La mejor carrera de un día fuera de las cinco históricas —Milán-San Remo, Tour de Flandes, París-Roubaix, Lieja-Bastogne-Lieja y Giro de Lombardía—. En su corto periplo, la prueba de las carreteras de tierra de la Toscana ha tenido actuaciones míticas. Y el pasado 5 de marzo buscaba una nueva edición memorable.
Parecía difícil mejorar el espectáculo del año pasado, cuando Mathieu van der Poel se impuso a base de ataques brutales en el sterrato y en la cuesta que lleva a la Piazza del Campo. Y sin embargo, puede que el espectáculo de este 2022 haya sido todavía más impresionante. El responsable, claro, fue Tadej Pogacar, el implacable dominador del ciclismo mundial.
El accidente inicial de Allaphillippe
Pogacar era parte de la terna inicial de favoritos, junto al campeón del mundo, Julian Allaphillippe, y el belga del Jumbo-Visma, Tiesj Benoot. Pronto cayeron de la pelea los otros dos. Allaphillippe sufrío un espectacular accidente a unos 100 kilómetros de meta, que lo lastraría según la carrera avanzaba. Y Benoot ni siquiera llegó a meta: se retiró de la carrera, también por accidente, a falta de muchos kilómetros.
Así pues, solo quedaba Pogacar. Allaphillipe pareció decir “aquí estoy yo”, y protagonizó un cambio de ritmo en una de las muchas colinas toscanas por las que pasa la Strade Bianche. Los otros favoritos lo siguieron sin dificultades. Y, al poco, el esloveno le respondió a su aceleración con otro ataque. Este sí mortal de necesidad.
La última locura del 'extraterrestre' Tadej Pogacar para hacer historia: El ataque letal… ¡a 50 km de meta!. 😍💪💪🏆 https://t.co/G3NQe4g3X9 pic.twitter.com/M7jxBki077
— ⚡Maza⚡ (@MazaCiclismo) March 6, 2022
Tadej Pogacar arrancó su moto a 50 kilómetros de meta, en uno de los tramos de sterrato más duros de la carrera: el Monte de Santa Maria, más de 10 kilómetros de tierra, plagados de subidas y bajadas. Se escapó. Solo Carlos Rodríguez lo siguió por unos minutos. Pero, al poco, el del UAE desapareció de la vista de todos. Y ya no lo verían más hasta la meta.
La guerra, por detrás
A partir de ahí, el ciclista esloveno protagonizó una contrarreloj individual 50 kilómetros en las que sus rivales no pudieron rebajarle tiempo. No lo hicieron cuando, en los tramos de carretera asfaltada, los equipos rivales se pusieron a trabajar. Y tampoco lo hicieron cuando un grupito de los favoritos que había sobrevivido a la carnicería —Kasper Asgreen, Alejandro Valverde, Tim Wellens, Quin Simmons y Jhonatan Narváez— tiraron y tiraron. Nada. Pogi es de otro mundo.
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Así pues, la guerra se estableció ya por el segundo puesto. Asgreen aceleró en el penúltimo tramo de sterrato, pero solo cogió unos segundos de ventaja. En el último, la colina de Le Tolfe, Valverde arrancó, dejó atrás al resto y se puso a su rueda. En la subida hacia la icónica Piazza del Campo de Siena, Valverde le atacó al danés y lo dejó atrás. El campeón, Pogacar, dominador absoluto, tiene 23 años. Valverde hará 42 en abril.
La prueba femenina, más competida
En Strade Bianche Donne, disputada horas antes de la prueba masculina, el espectáculo llegó hasta el último metro. La favorita Annemiek van Vleuten, que venía de ganar en Valencia y en la Omloop Het Nieuwsblad, atacó en la subida final hacia la plaza como siempre: sin mirar atrás. Parecía que nadie la podría seguir, como siempre. Pero no.
Lotte Kopecky, del SD Works, la siguió rozando la agonía. Se agarró a su rueda. Y en el callejeo por los angostos caminos que llevan a la Piazza del Campo, le sacó un metro que le dio la victoria. Quizás van Vleuten ya tiene nueva rival por excelencia tras la retirada de Anna van der Breggen.
Comienzan París-Niza y Tirreno-Adriático
Después del espectáculo de las carreteras de tierra de la Toscana, ahora es momento para dos de las carreras de una semana más importantes del calendario: Tirreno-Adriático y París-Niza. En la carrera francesa, la primera etapa del domingo 6 de marzo comenzó a lo bestia: triplete del Jumbo-Visma, con Christophe Laporte escoltado por Wout Van Aert y Primoz Roglic.
Por su parte, la Tirreno-Adriático se inicia el 7 de marzo con una contrarreloj. Hay varios grandes nombres: Remco Evenepoel, Jonas Vingegaard, Richie Porte. Pero uno destaca por encima de todos: Tadej Pogacar. En Betsson, se paga a 1,60 que el esloveno levante su segundo tridente consecutivo en la carrera de los dos mares. El monstruo lo devora todo.
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