El Real Madrid dejó vista para sentencia LaLiga el pasado 14 de marzo con una victoria inapelable en el Estadio de Son Moix, donde se impuso al Real Mallorca por 0-3. Vinicius Jr y un Karim Benzema en estado de gracia, que anotó un doblete, fueron demasiado para el conjunto balear. Los bermellones mantienen dos puntos de ventaja con los puestos de descenso.
Ahora, el 20 de marzo, llega el partido que todo el país espera: El Clásico. El Real Madrid recibirá a un Barça que viene a más desde la llegada de Xavi, y que espera confirmar en el Santiago Bernabéu las buenas sensaciones que le vienen acompañado en estos últimos tiempos. Pese a todo, en las casas de apuestas todavía ven como favorito al equipo merengue.
Una oportunidad que no se podía desaprovechar
El encuentro del pasado lunes 14 de marzo en el Estadio de Son Moix estaba marcado en el calendario futbolístico español. Tras los resultados del fin de semana, el Real Madrid tenía en ese partido una oportunidad perfecta para sentenciar LaLiga. El Sevilla, su más inmediato perseguidor, había cosechado tres empates en las últimas cuatro jornadas. Una victoria podría significar marcar diez puntos de distancia con el segundo puesto.
Por su parte, tampoco es que el Real Mallorca llegase en el mejor momento. Los entrenados por Luis García Plaza acumulaban cuatro derrotas consecutivas antes de la visita del Real Madrid, y su fortaleza para hacer frente a un equipo que venía de tumbar al todopoderoso PSG estaba puesta bajo duda. La realidad, al final, mostró que así era.
Karim Benzema sigue a lo suyo
Y es que más allá de que uno de los héroes del duelo ante el PSG, Luka Modric, no formase parte del once inicial, al Real Madrid le bastó con sus otros nombres propios. Especialmente, con el de Karim Benzema. El francés sigue dispuesto a reclamar el trono de mejor delantero centro del mundo y sentenció el partido por la vía rápida.
Primero, le regaló un gol a Vinicius Jr. tras un error en la salida de balón de Idrissu Baba, que perdió la bola en la frontal ante Fede Valverde. La jugada pasó por Benzema que, como siempre, la mejoró. Y Vini, que ya no es el Vini fallón de temporadas pasadas, no perdonó. 1-0.
Vinicius está juguetón https://t.co/m9uw8hDxiC
— paco (@semendecalvo2) March 14, 2022
La secuencia se repitió en el segundo gol. Asistencia de Benzema y el extremo brasileño que llega al remate. Solo que esta vez un defensa del Mallorca lo trabó, el árbitro pitó penalti y el delantero francés lo transformó. 2-0. El remache quedó para un cabezazo espectacular de, quién si no, Karim Benzema. El 9 del Real Madrid se elevó por encima de toda la defensa contraria, anotó su gol número 22 en LaLiga y sentenció el título para su equipo.
Un Clásico un poco más descafeinado
Los fanáticos del fútbol español, en cierto modo, esperaban una victoria del Real Mallorca en el partido del pasado 14 de marzo. ¿Por qué? Pues porque El Clásico se celebrará el próximo 20 de marzo y un FC Barcelona con opción de ponerse a nueve puntos del liderato sería sabroso, muy sabroso. Pero el caso es que los deseos se han quedado en eso, deseos.
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Esa cucharada descafeinada no quita que el gran derbi del fútbol español vaya a tener su morbo. Porque el Real Madrid siempre se motivará ante su eterno rival, más si cabe en el Santiago Bernabéu. Y los culés tienen una gran piedra de toque para su estado de forma ante los merengues. Desde la llegada de Xavi Hernández al banquillo, el equipo blaugrana amaga con parecerse cada vez un poco más al viejo Barça, aquel que deslumbraba con su fútbol. Y una victoria en la capital no haría más que confirmar dicha tendencia.
Los de Ancelotti, favoritos
En cualquier caso, el Real Madrid sigue siendo el equipo favorito para El Clásico según los expertos de las casas de apuestas. La victoria del equipo dirigido por Carlo Ancelotti se paga a 2,15 euros, mientras que la cotización de un triunfo del FC Barcelona es de 3,25 euros por euro apostado.
Habrá que ver lo que ocurre. Descafeinado o no, con el Real Madrid más centrado en su futuro cruce de Champions League o el Barça centrado en asaltar el infierno turco, lo cierto es que El Clásico siempre deparará espectáculo. Y quizás, quién sabe, algún día se recordará este partido como el encuentro en el que el equipo de Xavi Hernández comenzó a mostrar que volvía a la nobleza europea para quedarse.
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